De acuerdo con el sitio perezhilton.com, las imágenes forman parte de un proyecto personal de Shih para celebrar la reapertura de la boutique Dior en Shanghai.
Pese a que no integran alguna campaña oficial, la marca no se ha salvado de las críticas, pues aseguran que promueven la idea racista de que "todos los chinos se ven iguales".
Las distintas fotografías repiten un patrón, pues presentan a un grupo de personas con rasgos asiáticos, todas iguales, entre las que sobresale alguna modelo con ropa de Dior.
Sin embargo, Shih explicó su idea:
"Quería mostrar el poder de la gente china manteniéndose junta y un tipo de socialismo en la historia de China (sólo en la historia China, no en la China actual).
Los modelos chinos no son gente. Son símbolos de la historia china entre los años 60 y 80".
Además, el fotógrafo dijo que no usó a modelos de su país porque Dior le permitió usar a las modelos con las que trabaja en sus shows de alta costura en París.
"Seleccioné ocho modelos de acuerdo a cómo su vestuario hacía juego con mi paleta de colores".
Shih mencionó que Dior no tuvo nada qué ver en la creación del proyecto y él tuvo total libertad para las fotos.
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